El clorito de sodio en polvo al 80% es un compuesto químico eficaz para los procesos de tratamiento de aguas, tanto potables como residuales.
El clorito de sodio tiene dos usos principales en el tratamiento de aguas:
El clorito de sodio es un desinfectante eficaz contra una amplia gama de microorganismos, incluidos bacterias, virus y protozoos. Se utiliza para desinfectar agua potable, aguas residuales y aguas industriales.
El clorito de sodio se usa para desinfectar el agua mediante un proceso llamado cloración con dióxido de cloro. En este proceso, el clorito de sodio se disuelve en agua y luego se activa con un ácido, como el ácido cítrico o el ácido sulfúrico. La reacción produce dióxido de cloro, que es el agente desinfectante.
El clorito de sodio también se utiliza para remover compuestos como el hierro y el manganeso del agua, estos metales buscan ser eliminados puesto que pueden modificar las propiedades organolépticas del agua.
El mecanismo de acción del clorito de sodio se desarrolla mediante la reacción de este con el hierro y el manganeso, en la cual forma compuestos solubles que se pueden eliminar del agua mediante procesos de filtración o decantación.
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El clorito de sodio en polvo al 80% es un compuesto químico eficaz para los procesos de tratamiento de aguas, tanto potables como residuales.
El clorito de sodio tiene dos usos principales en el tratamiento de aguas:
El clorito de sodio es un desinfectante eficaz contra una amplia gama de microorganismos, incluidos bacterias, virus y protozoos. Se utiliza para desinfectar agua potable, aguas residuales y aguas industriales.
El clorito de sodio se usa para desinfectar el agua mediante un proceso llamado cloración con dióxido de cloro. En este proceso, el clorito de sodio se disuelve en agua y luego se activa con un ácido, como el ácido cítrico o el ácido sulfúrico. La reacción produce dióxido de cloro, que es el agente desinfectante.
El clorito de sodio también se utiliza para remover compuestos como el hierro y el manganeso del agua, estos metales buscan ser eliminados puesto que pueden modificar las propiedades organolépticas del agua.
El mecanismo de acción del clorito de sodio se desarrolla mediante la reacción de este con el hierro y el manganeso, en la cual forma compuestos solubles que se pueden eliminar del agua mediante procesos de filtración o decantación.
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